Ni heterosexual, ni monógamo

Pues hay un concurso literario en la bbcmundo.com que llama la atención porque propone escribir un cuento corto utilizando dos elementos obligatorios: mencionar un programa de la BBC y también una de dos palabras; anemoscopio o inverecundia. El reto lo lanzó un compañero de trabajo con el que discuto mariconerías y cristologías entre tecleo y tecleo. Fue quien me dio el título y la primera línea, por eso es justo y necesario dedicárselo a él.

 

Ni heterosexual, ni monógamo

A Nelson Perdomo Paz, compañero del alma

"Ni heterosexual, ni monógamo", pensó Gabby. "Eso jamás, primero muerto que sencillo", murmuró. Las reflexiones surgieron automáticamente, luego de escuhar en el noticiario vespertino de la BBC las decalarciones del Presidente del Movimiento Internacional de las Iglesias Pentecostales acerca de los requisitos para ser "verdadero" hijo de Dios en el siglo XXI. No le sorprendió la inverecundia del reverendo, pero le molestó la aparente paz mental con que eliminaba de las listas del cielo a todos sus amigos polígamos y homosexuales, inclusive a él: desviado y discotequero, pero temeroso de Jehová y humilde siervo cristiano. -M.C.C.

A continuación, el cuento de Nelson Perdomo Paz, también en bbcmundo.com:

Arcaicos

"El mundo que conocí se acabó", se dijo a sí mismo el profesor, mientras escuchaba a lo lejos la algarabía de los niños por la llegada de las máquinas que abrían carretera para conectar aquel pueblo arcaico con el resto de la civilización. Ese mundo que asomaba y esos nuevos héroes de verde -todos jóvenes- que domaban los ríos con sus puentes de acero, no lo alegraban porque los consideraba el principio de su fin. La vida no sería igual. Todos en Ríotinto hablaban de lo mismo, pero el profesor -como siempre- resolvía sus dilemas en largas horas de reflexión. Preparó su taza de café petróleo, que era su especialidad, y se fue al huerto, junto al gigante horno de pan de casa, y ahí en su hamaca y con su radio de onda corta pasó toda la tarde oyendo la BBC. Cuando llegó el momento para la oración de las seis de la tarde, apareció en la terraza frontal -donde estaba toda la familia- y dijo su frase final, que pocos comprendieron: "¡No se preocupen muchachos! Es sólo el viento cambiándole el curso al amenoscopio de nuestras vidas". -Nelson Perdomo paz, Olancho, HONDURAS.

Ahora una muestra de otro cuento breve escrito bajo las mismas condiciones en el mismo espacio virtual, la BBC hispana y postcolonial, ups:

Te imaginas: Sentados frente a Cabo Cañaveral, esperando que lancen el artefacto, y nosotros preguntándonos qué carajo es la inverecundia. No es el momento, cariño. Podemos volver a casa y buscarlo en el diccionario mientras escuchamos en la BBC las noticias sobre el lanzamiento. Después de todo, es la primera vez que lanzan un anemoscopio, y no un cohete, y además, tripulado. ¿Alunizará? ¿Amartizará? ¿Avenuzirá? Probablemente sólo eunomice y no tengamos mucha noticia que escuchar. Motivo para besarnos… tiempo para conversar. Espacio para amarnos, y el infinito para amarizar. -German, Ginebra, Suiza

Amor se escribe sin h


Yo me estacionaría allí alfrente,
a observar esas letras en espray,
a ver si es posible convertirlas en enrredaderas de plástico
antes de llevármelas pa casa.

La basura se ve bien ahí, es parte del paisaje.

Otra cosa son los ladrillos,
ésos habrá que negociarlos
porque
-tarde o temprano-
les da moho.

Hay grafiteros que los aceptan como vienen,
otros no; los pulen con terpentina y gas.

El resultado es una pasta rojiza que los despinta:
"Ablandaos"…,
pero que también sirve para garabatear.

Ahora que lo hippie ya no es cool,
porque eso sí que cuesta,
pues me parkeo,
no alucino,
y leo:
All you need is love.

Después de un rato en Londres,
buscando a la Vero de mis sueños,
luego de la hora del té,
entre tanta zona gris,
me pregunto,

¿Qué carajos será eso? Posted by Hello

Counter de enfermeras

El negro no puede llegar porque está en la sala de intensivo.

Los chupones que se conectan a las máquinas cardiacas emiten chillidos por latidos, una alarma perforadora de tímpanos que grita y calla.

A cada rato llega alguien que cambia sábanas, una segnora toma la temperatura, otra observa su vulva agrietada y no distingue disgustos en las caras.

Este es el tiempo de las úlceras. De las pieles colgantes. De los huesos astillados. Este es el tiempo.

Hace frío y el negro anda abrigado.

No le toca examinar el pulso pero agnora. Agnora jugar a parir y acariciarlo.

Hable con nadie

Si lo que te cabe en la cabeza es sólo lo que tienes, pues será difícil que entre lo que tengo para ti. Entonces, me contestarás lo que te dé la gana cada vez que te pregunte, dirás lo que no tiene que ver de primera intención, y no pasará nada, porque me acomplejaré si no no me entiendes o te encojonarás porque supuestamente no te dije, incomunicación, qué fuking dilema.