Repudio a la Resolución 99 (rango constitucional al matrimonio heterosexual)

marriage1Plantea Hannah Arendt que el miedo hace que los hombres se refugien en las costumbres y las instituciones. En este país algunos pretenden refugiarse en la Constitución y en las leyes. Es esta la punta de lanza de todos aquellos que proponen darle standing de constitucionalidad al matrimonio heterosexual frente al pánico moral que les produce el mundo del otro.

Mientras las fuerzas democráticas del planeta entero se mueven en la dirección de ampliar los derechos al reconocimiento, a la irreductibilidad que encarna el otro, a las diversas singularidades, a tono con el avance de los derechos humanos, el moral majority local pretende involucionar el ordenamiento jurídico y el estado de derecho vigente. (Después de todo, esto pasa en Puerto Rico al tiempo que la Organización de las Naciones Unidas se encuentra a punto de legislar en contra de la discriminación por preferencia sexual en el caso de los confinados!).

Plantea Niklas Luhmann, a su vez, que la tarea política principal de nuestros tiempos es combatir el parásito de la moral. Esto es, la forma en que la moral pretende infiltrarse y controlar todos los demás sistemas sociales, en este caso el jurídico y el politico. Se hace urgente pues distinguir la ética de la moral. La moral siempre tiene que ver con el deber ser, con una normatividad impuesta a la observancia de todos, mientras que la ética tiene que ver con la responsabilidad del sujeto en su carácter singular de evaluar la moral de una época, la responsabilidad de hacerse cargo de su tiempo en clave de las prácticas de libertad.

La Resolución 99 pretende homogenizar un social que no lo es, sujetarnos a la represiva uniformidad del estandar de la identidad (heterosexual) que se representa como mayoritaria. Asumamos el mundo tal cual es: Ni la heterosexualidad tiene el monopolio de la familia ni la familia es el monopolio.

Al decir de Jacobo Gusmán, debemos conceder a esa maravillosa idea en torno a las muchas y diversas maneras en que los seres humanos somos, efectivamente, humanos. ¡No habrá “Resolución” ni ley capaz de impedir la fuerza afectiva de este reconocimiento!

Madeline Román
Universidad de Puerto Rico-Río Piedras

Intoxicación: Décimas satíricas sobre un gran senador

BEATO

Por: Pepe Boricua

Yo, todo un legislador
de la Ínsula Barataria
con mi facha estrafalaria,
soy un señor senador.
Y les cuento con honor
que he sido un macho de ley,
todo un “auténtico” rey
que cumple con sus deberes
de maltratar a las mujeres
y odiar a muerte a los gays.

Claro, no es ningún mamey
mantener esta postura
porque la calle está dura
y sólo cuento con seis.
De Mayagüez a Cayey
todos me dicen Ňañito,
no me importa, hablo clarito
y me enredo con cualquiera
porque, créanme de veras,
soy bastante jodoncito.

Yo represento el distrito
del exilio y los mafiosos
de eso estoy orgulloso,
me he convertido en un mito.
Todos me aclaman a gritos
por las calles de San Juan;
sí, me gritan charlatán,
ruin, traidor y marrullero,
también pillo y embustero,
chanchullero y haragán.

No me importa el qué dirán,
pues ya llevo 20 años
subsistiendo del engaño
como un perfecto truhán.
Voy con mis gafas Ry-Van
orgulloso en mi motora,
pero les confieso ahora
aunque Picón no lo crea
que a veces con la correa
le doy fuete a mi señora.

Es que ella no valora
mi renombre y mi prestigio,
yo he sido un niño prodigio
y ella una vil pecadora.
Jorge Raschke, que me adora,
me ha pedido que me afeite
para ungirme con aceite
y exorcizar el maltrato,
pero le dije hace rato
que el maltrato es mi deleite.

Yo no la golpeo a muerte,
sólo un par de karatazos,
después le doy un abrazo
y le deseo buena suerte.
“No he dejado de quererte”.
le digo, “que es ley de Dios
una peleíta o dos
para aumentar la pasión,
después de todo, el chichón
ni siquiera te dolió”.

El otro día con to’
le di y la empujé rabioso,
sufrí un colapso nervioso,
creí que era Rosselló.
mi mente se confundió
en medio de la tensión
buscando una solución
y un minutito de paz,
me empujé 30 Xanax
y medio litro de ron.

No preví la reacción,
convulsé como una loca,
boté espuma por la boca
y chillé como un lechón.
“eso es intoxicación”,
mi médico sentenció,
“un calmante se tomó
y lo mezcló con café”.
pero lo más triste fue
que ni mami le creyó.

Hoy se comenta que yo
intenté un vulgar suicidio
y aseguran que hasta un vídeo
en mi casa se grabó.
No crean el cuento, ¡por Dios!,
que soy un cristiano puro,
Raschke y Milton, se lo juro,
no tengo instintos suicidas,
si he de quitarme la vida,
me la quito con cianuro.

A mi pueblo le aseguro
que, según dijo el doctor,
fui de malas a peor
por tomarme un café oscuro.
Las Xanax en el apuro
fueron muy mala elección,
y si me empujé un montón
antes de gotearme al piso,
ante Dios les garantizo
que fue una intoxicación.

Clara ya la situación,
ahora me marcho al Senado
en mi motora escoltado
por Raschke y Milton Picón.
Que me echen su bendición
para seguir con su grey
defendiendo nuestra ley
a favor del matrimonio
y que se lleve el demonio
a las “lesbis” y a los gays.

El gusano y el caballo

ojo

Escribe Pepe Boricua
Especial para Estruendomudo

Reunidos en una mesa
del restaurante Pelayo,
un gusano y un caballo
se ajotaban la cerveza.
El alcohol a la cabeza
se les fue al punto a los dos,
el gusano manoteó
en la cara del corcel
y enfureciéndose aquél
en dos patas relinchó.

Mas de nada le valió
porque el gusano con saña,
con alevosía y maña,
de un puño un ojo le hinchó.
Dicen que hasta se ca… nsó
el chongo del burrunazo,
no pensó que aquel bimbazo
se cruzaría en su camino…
Por eso dijo el equino:
“¡Me han hecho perder el paso!”.

Pero lo cierto del caso
en todo este revolú
es que fue culpa de Bush
ese sonoro tutazo.
El potente mameyazo
hoy la isla entera disfruta
y es la verdad absoluta
que al caballo en esa acción
lo noquearon por bocón
y rodó como una fruta.

Previo al golpe, en la disputa,
a Bush le dijo asesino,
además dijo el equino
que Bush era un hijo ‘e puta.
Y si es cierta la minuta
del tremendo notición,
lo tildó de mamalón,
idiota, imbécil, demente
y añadió que el Presidente
era también un cabrón.

El gusano hecho un león
defendió a su presidente
diciendo que era decente
aunque robó una elección.
Agregó: “Tu acusación
para mí es una desgracia,
Bush mata niños en Asia,
en África y en Irak
pero sabes que en verdad
lo hace por la democracia”.

Ahí vino el golpe de gracia
a la cara del caballo,
que sólo dijo “¡eah rayo!”
ante tanta diplomacia.
Gringo por antonomasia,
el gusano tiró el puño
y en el nombre de Fortuño
le dio un piñazo en el ojo,
miró a todos de reojo
y escapó sin un rasguño.

Es héroe de nuevo cuño
el gusano y a las millas
recordando a Maravilla
lo aplaude todo el terruño.
Todos celebran el puño
que le propinó al corcel;
pero, si es tan bravo él,
que a un avión pronto se suba
y que se atreva ir a Cuba
a darle un puño a Fidel.

Aprendan todos de aquel
que insultar al Presidente
puede costarles los dientes
o hasta un ojo como a él.
Bush es santo y es sincero,
buen cristiano, misionero,
honesto, valiente y puro,
quien lo increpe, de seguro,
se arriesga perder el cuero.

Así, el caballo cerrero,
tan dado a meter la pata,
a curar sus garrapatas
debe largarse a un potrero.
Mas, debe frenar primero
su lengua atrevida y bruta:
Con gusanos no discuta
so pena de un pescozón
y evite decir “cabrón,
asesino e hijo ‘e puta”.

Poética

08

just when he said: tornado

a mí me gusta que dure la sensación

justo para cuando se acabe

salir

de allí

II.

también la incertidumbre de regresar

unirme al viento salvaje

porque él me agarra

y me envuelve:

nieblando mi deseo de ti

arrebatándome del subsuelo

-con intención de desarraigar

III.

No sirven los repuestos

deliro

juego

con la fascinación

IV.

Reunido con la chatarra

doy vueltas

en la densidad

que, luego, me suspende la levetud

peso peso

revienta pesar

V.

como

VI.

Allá dentro

herido de icompletud

se hace nada la longa, el instante con vos

VI.

Retengo pedacitos de fe

auroras masacradas por el chorro

de tinta negra

y virtual

VII.

Yo no sé

pero me cuentan

duermo

y me empeño en contar sin decir

apoderándome con un lazo

del viento que no se puede tocar

VIII.

1 Kerry Degman

IX.

and then he said: que me escupan los dientes del tornado

se aplique lo que convenga

el posible seguro social

la caída en red

X.

un salto a la antiguedad

sobre huellas

en desdibujación

con tótems de lázer

para hincarme en la ruina de la última

victoria del hombre que fui.

-Manuel Clavell Carrasquillo
A juan