En los noventa mataban a cualquiera por las Jordans y sobrevivió. Llegó a lucir su cadenita de plata fígaro con el pendant de la matita de marihuana. Jugó baloncesto en Juan Domingo y no lo cogieron de pendejo siempre. En noveno llegó a tercera cinco veces; dos con la misma nena. Le compró el tape de The Noise a uno de los becados de su clase. Empezó a fumar a Newports. Junto con el hijo del dueño de Lamour Video montó un lucrativo negocio de películas porno que estableció records de venta en el recreo. Para ese entonces Juanqui ya le había dicho que lo más cabrón era mearle encima a una nena y le creyó. A los 16 ya había librao con una gordita chulisnaqui con frenillo. Los padres le regalaron un volvo viejo blanco. Le puso "buduska" en honor a la gordita. Chonqueó al menos once veces en el parking de Yesterdays. Peleó con el chamaco más caco de Marista frente al Seven. Borró cinta el weeken de las justas. Chocó el carro. La segunda vez que se tiró a una nena, le dieron calzo.
El autor (San Juan de Puerto Rico, 1979) es poeta. Sus libros "Veinte" (2000), "Sonero" (2003) y "Teoría de conspiración" (2005) fueron publicados y distribuidos en San Juan y Santo Domingo por Isla Negra. Este relato pertenece a sus recientes coqueteos con la narrativa.